Se trata de sintonía, ¿sabéis? Dos personas haciendo algo al mismo tiempo. Separadas por un océano, sí, con cielos más o menos grandes encima de ellas y hierba más o menos verde a sus pies, con asfalto más frío o más caliente y nubes más blancas o más grises. El caso es que no importa nada de esto. No importan ni todos los peces que las separan. No importa que allí no haya ardillas o que aquí no haya calles estrechas. Eso qué más da, cuando hay dos personas haciendo algo al mismo tiempo. Algo tan sencillo como... Sí, lo sabéis; no querréis que me ponga cursi ahora.
Sintonía.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario